El 25 de Noviembre de 1.972, siendo alcalde Mariano Horno Liria, el Ayuntamiento de Zaragoza, entre otros acuerdos, decide la cesión gratuita a la Caja de Compensación y Reaseguros de Mutualidades Laborales dependiente del Ministerio de Trabajo de una parcela de 12.000 m2 de superficie sita en la denominada Torre de Santa Engracia para la construcción de una Residencia de Ancianos en el Barrio de Movera.
El 13 de Diciembre de este mismo año, el entonces ministro de Trabajo, don Licinio de la Fuente visita el Ayuntamiento de Zaragoza para ultimar el acuerdo de cesión de los terrenos.
Tendrían que pasar casi 4 años años hasta que en Mayo de 1.976 se produjera el ingreso del primer residente, desde entonces y de forma ininterrumpida ha prestado el servicio social para el cual fue construida.
Resulta extraño que la inauguración oficial de esta instalación no se produjera hasta el día 2 de Junio de 1.977, tal vez tuviera algo que ver el período electoral en el que se encontraba inmerso el país y que trece días después se celebrarían las primeras elecciones democráticas en España desde 1.936.
El acto lo presidió el Subsecretario de Seguridad Social Victorino Anguera Sansó acompañado de otras autoridades. La capacidad de la residencia era de 230 plazas distribuidas en varias plantas que suponían unos 13.000 m2 edificados.
A la entrada de la residencia recibió a las autoridades la rondalla del Hogar del Pensionista del Boterón que interpretó varias jotas, una de las cuales aludía al acto de este modo:
Si con la jota pudiera
mis deseos realizar
yo les pediría a ustedes
muchas residencias más
Acto de bendición de las nuevas instalaciones
El 20 de Octubre de 1.987 visita la residencia el entonces ministro de Trabajo Manuel Chaves y almuerza en sus instalaciones.
En Junio de 2.002 se celebra el 25 Aniversario de la Residencia y se festeja por todo lo alto durante 5 días repletos de actividades.
Además de prestar la tarea eminentemente social para la cual fue creada, la residencia contaba con un servicio de café-restaurante que durante 20 años fue magníficamente regentado hasta su jubilación por el matrimonio formado por Eusebio Lázaro y Mª Jesús Sancho. Este restaurante servía de punto de reunión para los ancianos residentes y sus familias, así como para los vecinos del barrio y visitantes de la cercana piscina municipal y que durante este tiempo pudieron disfrutar de una cocina casera, familiar y entrañable. Además, en este espacio se realizaban los actos de animación y ocio para los ancianos; muchos han sido los espectáculos teatrales, rondallas de jota, funciones de Navidad, homenajes, etc. que se han celebrado en esa sala.
Con múltiples mejoras y adaptaciones necesarias realizadas a lo largo de los últimos años se ha llegado a un momento en que pasa por momentos muy delicados en lo que a su futuro atañe, desde su creación, dependiente de forma directa de organismos oficiales parece estar destinada a ser gestionada por la iniciativa privada. Esta situación de incertidumbre parece estar afectando muy seriamente no sólo al personal laboral sino a los propios residentes que recelan de un futuro incierto.
Desde el Instituto Aragonés de Servicios Sociales, organismo dependiente del Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia del Gobierno de Aragón, se justifica el cierre “de forma temporal” para acometer las obras necesarias para el correcto funcionamiento del centro y para los sindicatos el cierre supone el inicio del desmantelamiento de los servicios sociales públicos.
De forma progresiva se ha procedido al traslado de todos los ancianos a la residencia Santa Ana de Utebo y el día 30 de Abril de 2.014 salía el último usuario de este centro.
"Cuando se trabaja con fe y con alegría no se tiene derecho a nada, ni siquiera al éxito; se está pagado de antemano"
(Sacha Guitry)
